En esta ruta podremos visitar el Horno y el antiguo molino harinero, el castillo o ermita de los Pueyos, el salto de agua o chorro de San Juan, la cueva de marzo, las tumbas antropomorfas, la nevera y finalmente la ermita de San Juan. Además, podremos hacer escalada en la vía ferrata.
Tomaremos como punto de partida la plaza principal del municipio. Desde allí, iniciaremos la subida por la calle mayor hasta llegar al comienzo de la cuesta del horno, donde veremos un arco que inicia la subida. A mitad de cuesta a mano derecha, nos encontramos con el Horno de Pan Cocer, el cual podremos ver con visita guiada. Cuando por fin coronemos la cima de la cuesta, a mano izquierda podemos seguir un pequeño sendero que nos llevará hasta la ermita de los Pueyos. Seguiremos el camino de la cuesta hasta llegar a una esplanada, la Era, donde antiguamente se subía a trillar.
Continuaremos el camino de subida. Podemos hacer un alto en el camino y desviarnos por un camino a mano derecha, que nos llevaría hasta el antiguo molino de harina. Retomando el camino de subida, continuaremos hasta terminar la subida y empalmar con otro cabino que viene desde el Juncar. Aquí tenemos dos opciones:
La primera de ellas es coger un camino que baja hacia la base del Chorro de San juan. Allí se encuentra la caida de la cascada, donde si somos valientes y no hace demasiado frío, podremos bañarnos en sus aguas. Desde la misma base, hay un pequeño sendero que si lo seguimos, nos llevará a la parte trasera de la montaña, donde tras subir alguna que otra piedra, llegaremos hasta la Cueva de Marzo. Allí podemos hacer una parada para merendar.
La segunda opción consiste en continuar por el camino que venía desde el Juncar en dirección hacia la izquierda. Por este camino llegaremos a la parte alta del salto de San Juan. A mano izquierda, en la montaña tenemos la vía ferrata. Tenemos un tiempo de acceso de unos 10 minutos subiendo la montaña y el recorrido tiene un total de 180 metros, con una ascensión de 30 minutos y un descenso de 20 minutos. La dificultad es poco difícil, pero de igual manera es obligatorio el uso de arnés, un casco, guantes y un cabo doble de anclaje homologado.
Continuando por el camino podemos hacer un alto para bajar las escaleras de la izquierda, cruzar el puente de madera y llegar al otro lado donde nos encontramos las antiguas tumbas antropomorfas. Estas antiguas tumbas forman parte de la historia de Las Cuevas de Cañart y se conservan bastante bien a pesar de lo antiguas que son. Desde ellas, si no tenemos vértigo, podemos asomarnos para ver el Chorro de San Juan en todo su recorrido, desde la cima de la montaña hasta la caída a la base.
Retomaremos el camino que estábamos siguiendo antes de desviarnos a las tumbas antropomorfas para llegar hasta un cruce, en el cual si tomamos un pequeño desvío hacia la izquierda, llegaremos hasta la antigua nevera. Si por el contrario continuamos el camino por la derecha y seguimos subiendo, llegaremos a una esplanada en la cual sin dejar el camino, encontraremos la Ermita de San Juan a mano derecha. Y aquí llegamos al final de nuestra excursión, podemos aprovechar en merendar en sus mesas y refrescarnos veviendo agua del mismo nacimiento del Chorro de San Juan, ubicado bajando unas escaleras que hay en el lateral de la ermita.
En esta ruta vamos a poder visitar en primer lugar la ermita de San Blas, después el Portal de Marzo, y durante nuestro trayecto nos encontraremos con el Terrero, el monte del Canto del Cuchillo, la fuente del piojo y finalmente llegaremos a nuestro destino, El Estrecho, donde podremos merendar y hacer también escalada.
De igual manera que en la ruta anterior, vamos a tomar como punto de salida la Plaza Mayor. Descenderemos esta vez por la calle mayor hasta desviarnos hacia la calle de San Blas. Allí, dejaremos a la izquierda la Pensión de La Fonda y continuaremos hasta llegar a una replaceta donde encontraremos la ermita de San Blas, a la cual podremos acceder en las visitas guiadas. Bajaremos hacia la calle baja hasta llegar al Portal de Marzo, que indicará el inicio de nuestro camino hacia el Estrecho.
Al poco de iniciar nuestro descenso hacia El Estrecho, encontraremos un camino que nos desvía a mano derecha. Podemos seguirlo para llegar a la montaña que se ve desde la carretera que lleva hacia la fuente y el lavadero. Allí, la primera parte de la montaña que vamos a encontrar es la conocida como El Terrero, de tierra de un color rojizo, a la cual cuando éramos pequeños nos gustaba ir con sacos de patatas para lanzarnos ladera abajo. Si seguimos subiendo la montaña hasta la cima y nos dirigimos hacia la izquierda, llegaremos a la parte alta del estrecho. A esta parte alta de la montaña se la conoce como Canto del Cuchillo, pues vista desde lejos, parece tener la forma del filo de un cuchillo. Su altitud es de 1114 metros.
Retomando el camino de bajada hacia el estrecho, esta vez sin desviarnos hacia El Terrero, continuaremos descendiendo por el camino. Poco antes de llegar a un pequeño puente, encontramos a mano izquierda una pequeña "pozica" de agua que mana de la pared; es la Fuente del Piojo.
Proseguiremos nuestro camino hasta que finalmente visualizaremos El Estrecho. Se trata de un pasillo formado entre las paredes rocosas y semilisas de dos montañas, dejando circular entre ellas un pequeño riachuelo. Si continuásemos por este camino, llegaríamos finalmente a Ladruñán, pero si decidimos poner fin aquí a nuestra excursión, hay una esplanada donde podremos sentarnos sobre un banco de piedra improvisado para merendar, y posteriormente los aficionados a la escalada podrán ponerse a prueba escalando las pétreas paredes del estrecho